5 preguntas básicas que debés hacerte cuando hagas backups

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Tener al resguardo toda la información importante se vuelve esencial para mantener la integridad de un negocio, o una empresa.

En general, uno no se da cuenta de cuán importantes son ciertos datos, hasta que por alguna razón se pierden. Los backups se vuelven obligatorios si se quiere, por eso a la hora de realizarlos se debe hacer a conciencia y con suma disciplina. De nada sirve tener un plan de backups si éste está mal planteado y ejecutado.
Es por eso que te vamos a dar ciertas pautas para que tu “operación backup” sea todo un éxito.

Lo esencial es hacerse 5 preguntas básicas para lograr el ordenamiento adecuado.

1. ¿Qué?

Un backup no es simplemente el almacenamiento indiscriminado de todos los archivos del sistema. Más bien hay que valorizar la información y decidir qué información necesita tener una copia de respaldo. Lo primero es detectar qué info queremos salvar de un posible desastre. Una vez detectados, el siguiente paso será ver qué tamaño ocupan, y así determinar la capacidad de almacenaje que necesitamos; y clasificarlos por importancia.

2. ¿Dónde?

En segundo lugar, es importante definir cómo será almacenada y respaldada la información. Hay gran cantidad de métodos y tecnologías disponibles para esto, y entre las más frecuentes podemos mencionar, por el lado del hardware, dispositivos USB, dispositivos ópticos, como así también discos rígidos en la nube.

Cualquiera de estas posibilidades es viable. Pero dependerá el uso de uno u otro, el tamaño del backup, los costos y otros factores como fiabilidad y velocidad. Sí o sí, un backup debe alojarse en un medio físico diferente al de origen; y en la medida de lo posible, almacenarse en un lugar geográficamente distinto.

Además, dependiendo de la importancia de la información y su volumen, se pueden tener varias copias redundantes en medios diferentes. Eso sería lo ideal.

4. ¿Qué tipo?

A la hora de realizar el copiado de la información, también hay que analizar cómo fraccionarla, de qué modo almacenarla:

  • De modo completo: Se copian todos los archivos; lo que da la ventaja de restaurar todo; aunque trae aparejado la desventaja de ocupar mucho espacio.
  • De modo incremental: Se parte de una copia completa, y con cada copia se almacenan los incrementos respecto a la copia anterior. La ventaja de este método es que así se ocupa poco espacio y las copias se transfieren rápidamente. Pero también cabe la posibilidad de no poder restaurar el backup completo.
  • De modo diferencial: Es similar al incremental sólo que cada copia almacena las diferencias respecto a la copia completa. La ventaja en este método radica en que se ocupa menos espacio que con una copia completa, pero sí ocupa más que las incrementales.

5. ¿Cómo?

Ya que tenemos resueltas las preguntas anteriores, nos queda saber cómo haremos las copias.

Automáticas o manuales

La ventaja de las automáticas es que no debemos estar pendientes de ellas. Se realizan aunque, no nos acordemos. El inconveniente de éstas es, precisamente, su automatismo. Nunca estamos seguros de cuán bien se realizan. Es por ello que toda copia automática debe incluir algún mecanismo de control de su realización correcta y una notificación de su estado, para minimizar riesgos.

Es importante comprobar cada cierto tiempo que las copias se están realizando correctamente.

Con scripts programados o herramientas de backups

Esto dependerá de nuestros conocimientos y la naturaleza de los datos a poner a salvo.
Con un script programado tendrás un control total de tus copias. Aunque suele consumir bastante tiempo, y no está al alcance de todos. Una herramienta de backup, en cambio, suele resolver las necesidades de backup de la mayoría de los casos.

Y, al estar probada por muchos usuarios, otorga fiabilidad y sencillez en su uso.

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