5 claves sobre cómo administrar una Pyme

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Todo emprendedor posee una meta, y es que su Pyme, su idea de negocio surgida con tanto entusiasmo y esmero, tenga sus frutos, y prospere con el tiempo.

Pero para lograr el éxito en los negocios, además de tener un objetivo claro y saber a fondo qué es lo que se comercializa, es imprescindible llevar adelante una buena administración.

Si bien administrar una Pyme no es igual que manejar una multinacional, existen pautas generales que, de aplicarlas, pueden facilitar el camino al éxito de cualquier negocio:

1. Tener una clara planificación

Como dijimos anteriormente, conocer el negocio, el sector en el que opera, el entorno en el que se mueve, y la competencia, te topará con una serie de objetivos medibles, fiables y realistas, que podrás cumplir sin mayores inconvenientes.

Una buena planificación te llevará a la necesidad de contar con un sistema de gestión para ayudarte a llevar con prolijidad los números y tareas diarias, lo cual te permitirá optimizar el tiempo, y centrar tu atención en nuevas oportunidades de negocio.

2. Evitar préstamos

Siempre que sea posible, para evitar agobios innecesarios en lo que se refiere a pagos por intereses bancarios, por ejemplo, lo más aconsejable es emplear siempre capital propio.

Por eso hay que sumar una buena planificación financiera para llevar adelante sanamente la administración de una Pyme, porque al conocer el capital real con el que se cuenta, es posible establecer el control de gastos y ganar solvencia económica que permita a la empresa ser rentable.

En este sentido, para gestionar correctamente una empresa, es fundamental contar con información de calidad y analizar diariamente los principales indicadores.

3. Aprender a delegar

Uno de los aspectos más difíciles pero fundamentales en el proceso de crecimiento es aprender a delegar y formar equipo, esto es, involucrar a toda la empresa, como una forma de encontrar talentos e impulsar su crecimiento dentro de la empresa.

Es necesario aprender a escuchar, entender y valorar las ideas u opiniones de todo el equipo de trabajo, porque es lo que lleva no sólo a aliviar la carga de responsabilidades, sino también a divisar las oportunidades y las soluciones de problemas desde diferentes perspectivas.

4. Estar actualizado

Mantenerse al tanto de los cambios o acontecimientos que suceden en el país y en el mundo en cuanto a los negocios de tu sector, te será de gran utilidad ya que pueden tener efecto en tu Pyme dando o quitándole rentabilidad. Por lo que hay que estar bien atentos al entorno.

En este punto también destacamos la necesidad de mantener entrenados a tus empleados, ofreciéndoles capacitaciones a medida que se vayan actualizando, para que siempre puedan operar a la orden del día.
Esto se verá reflejado en el mejoramiento de los procesos internos, lo que será beneficioso para la optimización de recursos.

Estar actualizado en cuanto a los aspectos legales para tu Pyme, también se vuelve de suma importancia.

Y por supuesto, seguir de cerca los gustos y preferencias de tus clientes te permitirá ofrecerles siempre lo que necesitan. Es fundamental mantenerse actualizados en este sentido, estar a la vanguardia, ya que sin clientes no hay mercado sostenible.

5. Documentar

Esto se vuelve muy necesario para obtener un crecimiento ordenado, con la cuentas claras, una gestión de inventarios efectivo, es decir, un buena administración.

Y aquí volvemos a centrarnos en la necesidad de respaldarse en un sistema de gestión confiable que lleve con eficacia estos aspectos fundamentales.

Para finalizar, podemos decir que para llevar adelante una buena administración no alcanza con hacer buenos negocios. Es necesario mantener una actitud de liderazgo, positiva y propositiva, y una mente que siempre proyecte hacia el futuro. En otras palabras, hay que amar el proyecto, y disfrutarlo.

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